El futuro de Wi-Max

En el año 2005 y a raíz de una intervención en el III Foro Iberoamericano AHCIET Móvil, hice una encendida defensa acerca de cómo creo que los operadores móviles aún tienen ventajas que les permitirá que su modelo de negocios no se vea tan afectado como lo ha estado el de los operadores fijos.

Recientemente, Analysis.com publicó un artículo llamado “Wi-MAX is dead, long live Wi-MAX” y a priori resulta muy fácil subir al mismo tren declarando la muerte de una tecnología que hasta ahora ha tenido nulo impacto en el mercado.

Hay sin embargo un punto a considerar, recientemente Skype solicitó a la FCC (archivo PDF) que se establezca el derecho de que un usuario de redes celulares pueda usar el dispositivo (teléfono, modem, etc.) que desee sin necesidad de que éste haya sido provisto por el operador del servicio.

Hay que recordar que esta facultad, que hoy es lo más normal en servicios de telefonía fija, no existía hasta 1968 cuando la FCC emitió su decisión sobre el caso Carterfone. Por eso hoy se habla de que Skype está solicitando que se aplican las reglas del caso Carterfone a las redes celulares.

El tema de si esto es conveniente o no para los operadores es grande pero caben dos ejemplos: los operadores pequeños o en países en desarrollo, fomentan la práctica para eliminar una barrera para potenciales nuevos suscriptores; por otro lado, un operador dominante o en un mercado desarrollado busca usar su tamaño para contar con mayores descuentos por volumen o incluso negociar exclusividades (es el caso de Cingular/AT&T con el iPhone y de Telcel en México durante el primer año de la Blackberry en el país).

Es muy probable que pasen varios años antes de que la FCC tome una decisión tan radical como lo fue en su momento la relacionada al Carterfone. En aquellos años el problema era el poder de un proveedor monopólico del servicio y del equipo, a diferencia de hoy cuando el usuario puede comprar equipo de múltiples proveedores a través de múltiples operadores y si bien el usuario no tiene opción más que adquirir los equipos que el operador decida ofrecer, se beneficia al adquirir equipos sin costo o con subsidios.

Pero regresando al tema de Wi-Max, el gran éxito de la tecnología seguro que no se deberá a sus ventajas prometidas en mayores anchos de banda y grandes extensiones de cobertura (que son debatibles) y para las que será difícil vencer la inercia de la masa crítica de usuarios de servicios celulares 3G y posteriores que ya se viene acumulando desde hace unos años.

El éxito de Wi-Max puede radicar en ser una tecnología que desde su concepción está abierta para que el usuario elija los equipos que desee para conectarse a la red. Así está diseñada técnicamente, falta ver que el modelo de negocios que involucre fabricantes de terminales y operadores quede integrado de la misma forma (es de esperarse, es el mismo modelo en el que Intel fundó su éxito en el mercado del cómputo personal). Si es el caso, Wi-Max ofrecerá una propuesta de valor única, no disponible en ningún servicio celular (hasta hoy).

La voz sobre Internet nació muy poco después de la popularización del Web browser y para 1999 representaba menos del 0.5% del tráfico de Larga Distancia internacional, esto según una estadística que cito de memoria y que en ese año declaraba “la muerte de la Voz sobre IP”.

Cómo NO hacer dinero vendiendo QoS

Andrew Odlyzko es probablemente el investigador que más seriamente ha abordado la posibilidad de aplicar esquemas de cobro diferenciado (en función del tipo y volumen de tráfico transmitido) en servicios de acceso a Internet .

En 2004 hizo una revisión historica (archivo PDF) a varios casos en la industria del transporte (otra industria con efectos de red) resaltando la importancia que para su desarrollo tuvo la adopción de esquemas de cobros diferenciados. En función de ello es que Odlyzko entiende el interés de las empresas de telecomunicaciones por generar más ingresos con esquemas similares basados en calidad de servicio (QoS), sin embargo concluía que la Internet era especial y que los antecedentes de la industria del transporte podían servir de poco para explicar el futuro de la red.

Hace un par de meses Odlyzko publicó un nuevo paper (Archivo PDF) con David Levinson donde abunda en el tema preguntándose si implantar esquemas más detallados de cobro puede implicar costos más grandes que los posibles ingresos asociados.

El tema es relevante para la cada vez más acalorada discusión sobre neutralidad de la red. Que los operadores establezcan cobros diferenciados ¿es algo que podría acabar con la red como hoy la conocemos o simplemente una mala decisión de negocios que los operadores terminarían abandonando?.

Personalmente soy de la idea de que cualquier intento por generar más utilidades de los servicios básicos de acceso será insignificante respecto a la tendencia a largo plazo de reducción de los precios.

Vonage: Final inesperado

No, no era inesperado que eventualmente nos encontráramos ante la posibilidad de un cierre de operaciones de Vonage.

La Internet está llena de empresas que alcanzaron fama inmediata amenazando el negocio de algún incumbente (Nestscape vs Microsoft, Napster vs las disqueras) pero que terminaron no siendo viables en el largo plazo.

Se tendría que ignorar por completo la historia de las Telecom e Internet para poder augurar un gran futuro para Vonage. El editor de Billing World , Jerry Lucas ha escrito varios ensayos al respecto y de uno de ellos cito:

“There are only three sustainable VoIP business models: if you own the access arrangement (cable operators and ILECs); if you are a VoIP wholesaler supporting access holders; or if you are a CLEC, using digital access or leasing T-1s or T-3s from the ILEC and serving business-only customers.”

Lo que nadie esperaba es que el posible final de Vonage (que aún cuando Vonage perdiera definitivamente el caso, esto no significaría el cierre inmediato de la empresa) tuviera que ver más con una violación de patentes que con un modelo de negocios que de cualquier forma no era sostenible. Por ejemplo, el Wall Street Journal reportó que Vonage invierte $275USD en marketing por cada nuevo cliente, casi el triple de lo que es normal en la industria (Axtel por ejemplo gasta $100USD de acuerdo a Merrill Lynch).

Actualización del 16 de abril:
Telecoms.com reporta que Vonage informó a la corte que no tiene un remedio para “dar la vuelta” a las patentes de Verizon. Es muy probable que más malas noticias se den a conocer pronto.

Actualización del 25 de abril:
El Washington Post confirma que Vonage ha ganado el derecho de poder seguir vendiendo su servicio. No me retracto de mi punto original: de cualquier forma el modelo de negocios de Vonage no es viable en el largo plazo.

Broadband: ¿Piratería o Promoción?

Un estudio de la Universidad Carnegie Mellon afirma que durante los años entre 2000 y 2003, el incremento en la penetración de servicios broadband fue determinante en el incremento que en los mismos años se dió en la venta de DVDs.

“Using the most conservative results, we find that 9.3% of the $14.1 billion increase in DVD sales during our study period can be directly attributed to increased broadband Internet penetration.”

¿Por qué no ocurrió lo mismo con la música? la aparición de Napster y otros servicios de intercambio de archivos coincidió con la peor recesión que la industria discográfica ha sufrido en su historia.

Me parece que la explicación radica en que la experiencia de bajar una canción pirata en MP3 para escucharla de fondo en la PC es similar (de hecho es superior al contar con un inmenso catálogo disponible inmediatamente) a la que se tiene al escuchar radio o un CD.

Pero, ¿bajar una película? ¿cuándo fué la última vez que tuviste la paciencia de bajar una película completa en alta resolución para después enfrentarte al dolor de quemarla en un DVD para poderla verla en TV?

Porque las películas se ven por TV, no en el monitor de una PC. Si bien productos como Apple TV pretenden hacer más agradable la experiencia (por tan sólo $250 USD) , el periférico equivalente para poder disfrutar de un archivo MP3 resulta mucho más asequible (¿qué tal un par de audífonos de menos de $100 pesitos?).

En ese sentido, aún falta mucho para que la piratería de video por Internet sea verdaderamente un sustituto de la experiencia de ver un DVD. Pero cuando eso ocurra, difícilmente la conectividad broadband será vista como un “promotor” de la venta de DVDs.

Las “condiciones regulatorias” para Wi-Max

” … el país se rezagó no sólo ante las naciones más desarrolladas sino ante naciones como Chile. Es absurdo que Telmex pueda dar servicio de wi-max (sic) en aquel país sudamericano y en México no estén listas las condiciones regulatorias.”

David Páramo. Excélsior 13 de marzo de 2007

¿Alguien le puede explicar a David Páramo que Telmex YA cuenta con espectro que hoy le permitiría ofrecer Wi-Max si así lo decidiera? (de hecho desde hace más de 8 años, mucho antes incluso de que la tecnología existiera).

¿La muerte de la telefonía móvil?

La revista The Economist en su portada del 17 de septiembre de 2005 proclamó la muerte del negocio telefónico en manos de Internet. Al contemplar la desaparición del negocio de larga distancia y los operadores dedicados a él, es poco lo que se puede argumentar en contra al artículo, sin embargo, The Economist se equivoca al creer que los operadores móviles la pasarán peor que sus contrapartes fijos en los años que vienen. Es la intención de este artículo demostrar por qué.

Primero el hecho. The Economist parte de la opinión de una firma de capital de acuerdo a la cual los ingresos de los operadores celulares dependen de al menos un 80% de los servicios de voz, lo que los hace particularmente vulnerables en un mundo donde la voz será una aplicación casi gratuita transportada sobre redes de datos como Internet. Sí, la proporción citada es correcta, pero la conclusión es errónea, la industria de la telefonía móvil ha sido y será más o menos inmune al proceso de “comoditización” que han sufrido los servicios fijos por las siguientes razones:

  • Las redes celulares aún son dueñas de sus destinos y lo serán por algunos años. A diferencia de los operadores fijos que han sufrido la amenaza que representan las empresas de cable o los servicios como Vonage/Skype, los operadores móviles prácticamente no han sufrido amenaza exógena significativa a sus modelos de negocios. Si en Europa algunas celulares entraron en una debacle fue por su propia culpa al sobre estimar el valor de frecuencias de tercera generación, no por la entrada de una punto-com llevando los precios al piso. Por años, la que podría ser la única amenaza real, Wi-Max, no ha dejado que ser algo más que buenos deseos expresados en archivos Powerpoint o en boletines de prensa.
  • Wi-Max no es causa, es sólo un efecto más de una revolución donde los operadores celulares ya son HOY protagonistas. Es probable que algunos años Wi-Max sea percibido como el gran disruptor de la red celular tradicional y eso será un error, tal y como hoy es un error considerar a empresas como Vonage como el origen de una nueva revolución. Vonage y Skype son sólo algunas de las consecuencias generadas por la adopción de IP como el protocolo universal para las telecomunicaciones. Es precisamente este movimiento universal a favor de IP que genera consecuencias como el interés en Wi-Max, sólo que para cuando Wi-Max móvil sea una realidad (¿2007?), las tecnologías celulares de banda ancha habrán cumplido casi 5 años en el mercado y pasarán más años antes de que aparezcan dispositivos Wi-Max similares a un handset celular.
  • La principal fuente de innovación en el mercado móvil… sigue siendo el operador móvil. Las empresas celulares llevan años invirtiendo en redes de Tercera Generación y servicios de datos. Los operadores fijos invirtieron en DSL sólo como respuesta a la amenaza del cable o buscando el ingreso que originalmente pertenecía a ISPs independientes como AOL en EU, Tiscali en Europa o UOL en Brasil.

CONCLUSIÓN: El acceso será predominantemente móvil. De acuerdo a The Economist (y éste es el grave error de juicio del artículo) en un mundo IP, sólo los operadores fijos que cuentan con líneas DSL estarán en condiciones de sobrevivir. Sí, la tendencia hacia la adopción de las redes IP puede relegar a los operadores móviles a simples proveedores de acceso. Pero qué fácil olvida The Economist que hoy los usuarios están reemplazando sus líneas fijas de telefonía por líneas móviles, si el mundo de la telefonía tradicional es predominantemente móvil, ¿por qué pensar que en el mundo de las telecomunicaciones IP será dominado por líneas DSL?, o peor aún, declarar la muerte del operador móvil. En su ejercicio de análisis, The Economist parece no haberse planteado esas preguntas.